Con más de 60 proyectos de emprendimiento se dio inicio a una nueva versión TPI 2020 de la Facultad de Ingeniería

El Taller de Proyectos Interdisciplinarios,TPI de la Facultad e Ingeniería de la Universidad Nacional de Colombia, es una materia donde se incentiva a los estudiantes a que desarrollen un proyecto, basándose en problemas relacionados con los objetivos de desarrollo sostenible. Para este nuevo año 2020 se presentaron sesenta y seis grupos, donde aproximadamente sesenta son de TPI y cinco grupos de otras áreas.

Camila Reigoso, coordinadora de monitores este semestre en TPI explica la metodología y cuales fueron los contenidos de los proyectos: «se presentaron diversos temas, pero como dato, en esta ocasión fueron enfocados la gran mayoría en la parte ambiental, recicable, ahorro de energía, ahorro de agua,cuidado del ecosistema, medicina, salud, entre otros afines […]». Y añadió: «[…]la metodología para esta nueva versión fue así: se dividieron 150 estudiantes en 5 grupos, en cada grupo donde se presentaron 677 proyectos, 6 personas, ahí se desarrollaban el 50 % para pasar a la final, otros profesores evaluaban el prototipo, es decir, producto final al que llegaron los estudiantes; por ejemplo: una app, un objeto físico, una página web, una imagen, al final ambas se computaban y los 6 puntajes más altos pasaban al gran final».

Este año como en las últimas versiones del evento, estuvo liderado por los profesores Alfonso Herrera y Hernán Cortés. En cuanto a los jurados, en esta oportunidad hicieron presencia representantes de Cafam, María Alejanadra Guzmán Pardo decana de la Facultad, algunos profesores del programa de Ingeniería Industrial entre otros.

El ganador del evento en la primera jornada fue el grupo conformado por estudiantes de Ingeniería Química, Valentina Monsalve, Yamid Rivera, Ingeniería Mecánica Juan Sebanstián Torres; Ingeniería Electrónica Carlos Pérez, en el proyecto de investigación abordaron el tema de los residuos textiles en la ciudad de Bogotá. Este consistió en la elaboración de una «placa» con material compuesto de residuos textiles y plásticos, los cuales pueden tener un uso rentable mediante la reutilización de la materia primera que los componen tanto orgánicas como sintéticas y con ellas generar nuevos productos que ayuden a disminuir la huella ambiental que genera su producción.

Así no lo explica Valentina: «Logramos un producto compuesto, cuyas características son muy parecidas a lo que es el polietileno, este está compuesto por fibras textiles y polietileno, ambos reciclados, en una relación en masa de tela-plástico de 10/90». El prototipo es sostenible porque es completamente elaborado a partir de desechos a los cuales se les está prolongando el tiempo de vida útil mediante la elaboración de un material que tiene múltiples aplicaciones y es un producto de valor agregado. Es sustentable porque contribuye a resolver una problemática muy grande que es la acumulación de residuos en las ciudades». Pero ¿cuál es la importancia de participar en este tipo de eventos? La experiencia de trabajar con personas de otras carreras, aprendimos como se estructura un proyecto, partiendo de un problema y la oportunidad de seguir desarrollándolo, se originó por el consumismo, el rápido cambio en las tendencias de la moda, la alta tasa de importación de prendas de países asiáticos la industria textil y la falta de cultura de la reutilización en prendas de vestir, añadió.

En la segunda jornada del evento, el proyecto ganador fue «Reciclar Residuos Textiles» lo componen: Nicolás Tabares y Manuela Sucerquia Ospina, Sebastián Realpe, Sheila Pradilla, Diego Chacón Cristian Restrepo y Andrés Calderón, ellos vieron una gran problemática en los residuos textiles siendo este, el segundo material más contaminante del mundo, tan solo superado por los hidrocarburos, y es qué, tras la falta de uso puntual para los desechos textiles en la ciudad de Bogotá, nació esta gran solución. Pero ¿en qué consiste el proyecto? Así no los explica los líderes del proyecto: «nosotros trabajamos una solución para integrar la industria textil a una economía circular. Se logra a través de la creación de etiquetas a partir del reciclaje de tintas, telas y papel de impresión derivados del proceso de sublimación textil, un proceso donde el 100% del papel usado es desechado y el proceso de lavado de las impresoras produce un galón de tinta semanal por impresora y estas, no son de fácil disposición».

Este grupo de emprendedores encontraron que una de las más grandes problemáticas son los residuos desmedidos, derivados del proceso de estampado digital por sublimación de telas a base de poliéster. Entre los mayores afectados están el papel de impresión especial para sublimación, el papel Kraft de protección y la mezcla de tinta, que es excedente de limpieza de impresoras. Con esto, el gran objetivo desde siempre fue la búsqueda e implementación de una segunda vida o alternativa para las tintas, telas y papel de impresión.

Fue entonces que con el apoyo de la empresa Sutex (compañía enfocada en conciencia ecológica de moda sostenible, además líderes en el campo del diseño, la innovación de producto, gestión de servicio al cliente y la responsabilidad social y ambiental, donde no solo se encarga de imprimir telas, sino tiene una línea de ropa) realizaron una consultoría, determinaron cuál era la problemática, se dieron cuenta y decidieron implementar esta técnica, de impresión por sublimación; el cual se transmite la impresión a las telas por calor, además la maquina requiere una limpieza constante, ya que se desperdiciaba el agua y las tintas, por ello, decidieron tomar esos residuos y mirar qué podían hacer con ellos, el proceso de Sublimación en el que se enfocaron es el: Papel - tinta.